Todo comenzó con una idea sencilla, reencontrarnos con nuestros amigos y compartir momentos especiales. Después de tanto tiempo sin vernos, tras la pandemia que vivimos y las circunstancias de la vida, sentíamos la necesidad de volver a juntarnos, de recuperar esos instantes que nos hacen ser felices. Y qué mejor manera de hacerlo que organizando un fin de semana especial, en un lugar con historia y significado para nosotros.
La Valmuza, el campo de golf donde queríamos celebrarlo llevaba años cerrado, pero gracias a Eustaquio Andrés, que lo puso en marcha de nuevo, encontramos el sitio perfecto para dar vida al Torneo Schuster & Friends.
Queríamos agradecerle su esfuerzo y al mismo tiempo, reunir a todos nuestros amigos para celebrar lo que realmente importa, la amistad, los buenos Momentos y las ganas de vivir.
Siempre recuerdo junto a Elena, los torneos de golf en los que hemos estado y la gente maravillosa que hemos conocido en ellos, muchos de los cuales pasaron de ser conocidos a convertirse en parte de nuestra familia. Algunos e incluso estuvieron en nuestra Boda, lo que demuestra, que estos encuentros son mucho más que un evento deportivo, son momentos que nos unen para siempre.
La 1ª Edición del Schuster & Friends fue una prueba, pero fue tan especial que, al terminar, tuve la sensación de haber vivido algo único. Era como volver a casarme rodeado de todos mis amigos. Ese sentimiento me gusto y me impulsó a continuar, a hacer una 2ª Edición del Schuster & Friends y a convertir este torneo en un proyecto con alma, con la ilusión de seguir reuniéndonos y, además , ayudar a quienes más lo necesitan.
Lo que comenzó como una iniciativa para reunir amigos y amantes del golf, se ha transformado en una comunidad comprometida con causas benéficas. En ediciones anteriores, hemos tenido el honor de colaborar con organizaciones como Banco de alimentos de Salamanca y Pyfano, asociación de padres, familiares y amigos de niños oncológicos de Castilla y León.
En esta 3ª Edición, Schuster & Friends mantiene firme su compromiso con las causas que realmente importan. Este año, mi corazón está con los niños que conviven con enfermedades raras y con sus familias, que luchan cada día en silencio. Por eso, lo recaudado irá destinado a la Fundación Aerscyl, que trabaja incansablemente para darles apoyo, dignidad y visibilidad. Sabemos que estas enfermedades no siempre ocupan titulares, pero sus necesidades son constantes. Y es precisamente cuando el foco mediático desaparece, cuando más apoyo necesitan.
Nuestro espíritu va más allá del golf donde Schuster & Friends es un símbolo de amistad, unión y solidaridad. No soy una persona de muchas palabras, pero sí de sentimientos. Y si algo tengo claro es que quiero tener cerca a mis amigos, a la gente que realmente importa.
Schuster & Friends
